viernes, 9 de noviembre de 2018

TARTA DE PIÑA INVERTIDA

Que os puedo decir de esta tarta que no sepáis ya!! Un delicioso bizcocho, super jugoso y esponjoso y lo mejor de todo, muy fácil de hacer. Además, mezclado con la piña, le da un toque muy fresco y ligero esta tarta.

Os dejo el enlace a la video-receta, para que veáis los pasos uno a uno, y os daréis cuenta de que no es para nada  complicada de hacer. También os dejo el enlace a mi canal en YouTube, donde podéis suscribiros desde aquí mismo gratuitamente, allí encontrareís un montón de recetas super fáciles de hacer.


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Dicho esto, os dejo los ingredientes y la elaboración de esta estupenda TARTA DE PIÑA INVERTIDA.

INGREDIENTES:
PARA EL CARAMELO
180 grs. Azúcar moreno
50 ml. Jugo de piña (Podemos utilizar el de la piña en su jugo)
50 grs. Mantequilla


PARA EL BIZCOCHO:
2 Huevos
120 grs.  Mantequilla
180 grs. Azúcar blanco normal
200 grs. Harina de trigo común todo uso
2 cdtas. levadura química
80 ml. Leche
50 ml. Jugo de piña (Podemos utilizar el de la piña en su jugo)
1 cdta Extracto o esencia de vainilla
1 pizca de sal
1 cdta Extracto o esencia de vainilla
6-8 Rodajas de piña
10-12 Cerezas en almíbar

ELABORACIÓN:
Lo primero que haremos será precalentar el horno a 180º C., y después, haremos el caramelo, para ello pondremos en un cazo a fuego medio bajo el azúcar moreno junto con el jugo de la piña, y mezclamos hasta que el azúcar se halla disuelto, después echaremos la mantequilla, y mezclamos de nuevo hasta conseguir que se funda, dejaremos un par de minutos hasta que espese un poquito.

Después echamos sobre el molde, yo en este caso he elegido uno de silicona de 23 cm. de diámetro, pero perfectamente, podéis utilizar los de metal. Extendemos bien el caramelo, hasta cubrir toda la base, seguidamente, colocamos la piña, dependiendo del tamaño de la piña, podréis colocarla todas enteras, o sino, como en mi caso que no entraban enteras, partidas por la mitad, y una vez colocadas, pondremos una guinda en cada hueco que hay entre piña y piña. Ahora pasamos a hacer el bizcocho.

En un bol echamos las claras de los huevos, y batimos con las varillas eléctricas, Cuando hayan espumado, echamos la mitad del azúcar blanco, y seguimos batiendo hasta que estén bien montadas. Por otro lado, en otro bol, batimos la mantequilla que ha de estar a temperatura ambiente junto con la otra mitad del azúcar y las yemas que incorporaremos de una en una, cuando esté todo bien integrado, incorporamos el jugo de piña y seguidamente la leche, seguimos batiendo. Por último, echamos el extracto de vainilla y la harina, la levadura y la sal, previamente tamizado. Mezclamos primero con la batidora apagada y cuando esté la harina integrada, batimos hasta que no veamos en el bol, nada de harina. Por último incorporamos el merengue  en varias tandas, con movimientos envolventes hasta que esté integgrado por completo.

Y  ya podemos echar la mezcla al molde, encima de la piña, con cuidado de que no se muevan del sitio. Alisamos bien con una expátula y hornearemos durante 50 minutos mas o menos, ya sabéis que depende de vuestros hornos, comprobaremos que está hecho al pinchar en el centro con un palillo y éste sale limpio.

Dejamos enfriar unos 20 minutos sobre una rejilla, pero antes y a modo opcional,  agujerear el bizcocho con un palillo, si os ha sobrado un poquito de jugo, ponerlo en una cazo a fuego medio bajo hasta que recuzca un poquito, así conseguimos un almibar ideal para impregnar el bizcocho y conseguir aun mucha mas jugosidad. Y desmoldamos antes de que esté totalmente frio, ya que el caramelo podría endurecerse demasiado y nos costaría desmoldar.
Y esta es la pintaza que tiene que tiene. No me digáis que no está como para cogerte un trocito ahora mismo.

Voy a cortar para que veáis como queda el bizcocho por dentro lo jugoso y ligero que ha quedado, y ni imagináis el olor que hay ahora mismo en mi cocina. Está delicioso, así que como siempre, os animo a que lo hagáis, porque ya habéis visto lo sencillo que es de hacer, y seguro os va a encantar.

Muchas gracias por ver la receta hasta el final, y hasta la próxima

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